Como alguien humano, "ÉL" empezó a sentir la reconfortante sensación que da el ayudar a alguien;
paso tiempo conociendo su alrededor e investigando los puntos débiles de cada objeto , planta , animal o persona para hacer el mayor daño posible.Pero esta vez , el peso de una conciencia desconocida hasta el momento , se hizo notar para acabar con la desolación sin esperanza y el temible rastro que dejaba tras sus pasos.
Tras días sin dormir, sin comer , sin tener relación con nade en absoluto llego a la conclusión de que la oscuridad se marchaba de su ser, y que la luz que notaba brillaba cada vez con mas fuerza.
Entonces decidió por primera vez en su "corta vida" que era hora de buscar la paz e intentar curar el mucho daño echo durante su corta estancia.Pero eso seria en otro momento pues debía descansar "su cuerpo" no aguantaría mucho mas.
Durmió durante días, teniendo extraños y terribles sueños sobre su vida cotidiana alejado de la realidad.
Nada mas real que el hombre recto que seguía encerrado en aquel mundo que codiciaba su alma.
Había aprendido muchísimas cosas y no buenas , pero si bastante útiles, aprovechando el descanso del , para el , "su otro yo"; intentó hacerse con su cuerpo y recuperar su vida , nada mas lejos de la realidad, rompió las cadenas que le unían a ese infierno y abrió los ojos.
La sensación fue indescriptible , entre saltos de alegría y gritos de aleluya dedico unas palabras a quien un día fue su captór,"Lo siento, pero te tienes que ir"
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